MOTOS JAPONESAS 2023: “2 COSITAS”.

MOTOS JAPONESAS 2023: “2 COSITAS”.

Aunque parezca una carta a los Reyes Magos del Sol Naciente en realidad me dirijo a Yukitoshi Fujisaka San Presidente de Honda, Hiroyuki Yanagi San de Yamaha, Shigeru Murayama San de Kawasaki y Satoshi Uchida de Suzuki.

Creo que tengo razón en mi exposición siguiente, pero los cuatro aludidos deberían contemplar mi sugerencias aunque solo sea por el trabajo que me supuso copiar aquí sus nombres.

Pero “Yendo al estribillo” diré que las motos japonesas son lo único que merece la pena tener en el mundo motociclista desde hace tiempo. Y antes de que se nos venga encima todo el desastre de los vehículos eléctricos sería conveniente recordar que hay un tipo de motos: las trail básicas que los japos deberían revisar antes del desastre eléctrico.

Y son sólo “2 cositas” las que le faltan a esas joyas básicas y económicas que pasan desapercibidas porque los motociclistas actuales sólo saben de monstruos imposibles de mover en parado, asi que de “menearlas” en marcha ni hablamos.

Yamaha XT 250 2023: Llantas de radios tubeless (miren las colombianas Murelli porfa, que aprovechan los bujes de serie) y pedal de arranque. Con eso…….

Honda Tornado 250: Las mismas 2 cositas de arriba y ponerle inyección de combustible (una nadería para Honda).

Kawasaki KLX 230 S: Idém, llantas y pedal.

Suzuki: Recuperen el 350cc de la Beta Alp 4.0 y apliquen la misma receta, llantas, pedal la Beta lo tiene e inyección, lo dicho en realidad 2 cositas.

Y tendremos moto para todo –solo una- para dar la vuelta al mundo subiendo videos de mamadas a youtube o para afrontar el Apocalipsis –estilo Max Mad- con éxito.

Ya saben ustedes los coches se van a amontonar durante las fugas y sólo los avisados irán en bici (para los cachas), en moto o a pata.

Del otro factor o sea el armamento hablaremos en otra ocasión.

Mientras los tarugos que sigan comprando libros de auto ayuda que es lo que se vende y les orientará en los desastres para joderla de volada.

“Tu vida y pensamiento camino a la felicidad y al éxtasis” de Lola de la Hera (es, sin h, pendeja del to) y Bartolomé.

 

José Juan Aparizio.

23-Febrero-2023.

 

 

 

 

BLOGUEROS DE VIAJES.

 

BLOGuEROS viajeros.

Hostel, mochilero, cutre y pendejo son conceptos básicos para entender la horda de blogueros viajeros que puebla las redes sociales.

Un joto empujando un carrito de la compra a través de china, un idiota en patinete, muchos a pata y en autobuses tercermundistas, les encantan las “chivas”, esos autobuses folkloricos y rurales colombianos con chasis de chapa y madera y ventanillas arremangadas de hule para cuando caen chuzos.

Queda uno muy cool en el video en medio  de gallinas y peruanas con sombrero hongo en la coronilla.

Lo del olor a “hierba” al entrar en el hostel es también de manual, como el gorrito de lana con orejeras a lo Manu Chao. Sin olvidar el pantalón bombacho de taliban –supercomodo- para llevar la mota arrebujada en los pliegues.

Con las rastas se ahorra uno una pasta en pelus, esto en estilo cutre, luego está la onda fashion dominada por el genero femenino que te acerca a resorts y “restos” especiales, con menus exoticos y playitas de transparente agua azul.

Los mexicanos y argentinos –siempre los más plastas- abundan por youtube dando consejos.

Que si no metas es hachis en la pasta de dientes que luego no prende, que si te hablan “mateando” todo en rato con la puta cazoleta del brebaje ese para memos en la mano y que debes procurar llevar el pasaporte colgado del cuello en la bolsita multicilor artesana de San Cristobal de las Casas.

Aunque todos son muy Hipis la lana no la llevan encima, o no la tienen, o tiran de tarjeta los muy antisistema, para no olvidarse de Marx ni del Capital.

Luego los directos con bici, moto, autocaravana, chilliditos, yuhussssss eternos, yuppiiiiiis, mega guays, coletas en la barba, barba de barber shop, o sea de pelu gay cara, tabla de surf, hoguera entre cocoteros, más mota, tequila y cogorzas de mamones que no aguantan la bebida.

Lo mejor es que como no se salen del circuito preestablecido para memos, nunca les pasa nada más grave que el picotazo de una tarántula, se mantienen en su zona de confort siendo felices en sus Mundos de Yupi.

“Y bueno, darle link, darle a la campanita, darle like, muchas gracias y que sigais siendo felices: “Pura Vida” (Esta es la frase fetiche de esta bola de retrasados mentales)”.

Asi que darle recuerdos a vuestra rechingada madre y darle ok a este escrito, o si no limpiaros digitalmente el culo con el.

Yo ya me cansé de perder tiempo y paciencia hablando de tontos del mismo sitio, si del orto o del fundillo como más os guste inaguantables blogueros viajeros.

 

José Juan Aparizio.

22-Febrero-2023.

 

 

ALLÁ EN EL TENAMPA

Allá en el Tenampa o:

La Tercera en el Tenampa.

 

El mismo retrato en la pared de Cornelio Reyna.

Los mismos mariachis de siempre.

El mismo trío de jarochos.

Los cuates norteños de fuera.

La misma noche calurosa del D.F.

Los mismos tacos en la cantina de al lado, dónde los norteños si pueden tocar.

Sólo que esta vez el güero iba sólo, con tejana blanca. botas de avestruz amarillas, cinturón de lagarto amarillo también, que no se veía, pues la camisa norteña roja de paramecios iba por fuera del pantalón. Lo seguían tratando allí como si fuera de Monterrey.

Afables, chingones, los muchachos cantando las imperdonables “Puño de Tierra y “La puerta Negra”, además de las suyas: “A las tres de la mañana”, “Güerita Cañón” y la nueva “Ni mandada hacer”.

Hago notar –por lo ecológico, mas que nada- que el cuero de los complementos, botas y cinto es sólo de imitación de esos bichitos y en realidad de vaca. Hay que respetar la biodiversidad. Aunque también me jode que abusemos de las vacas.

Pues sí, esta vez acudió a su plaza favorita, Garibaldi, sólo, a tomar, al más puro estilo adolorido.

Sólo que al segundo día ya “andaba de su brazo”, que dice el corrido, una prieta, reprieta, del Sur. Tabasco, para más señas. Dónde la salsa para los tarugos.

Simpática, fregona y súper divertida. Tomadora de mezcal, como él. Y ese segundo día se volaron la barda al más puro estilo Zacatecas, con zapateado de la morra encima de la mesa incluido, mientras los tres mariachis y los jarochos tocaban juntos huapangos. Para después cantar el güero aquello de:

“Tu estrella me dijo esta noche

 Que ya no vendrás”.

Amanecieron con acordeón y bajo sexto tomando el chocolate y los churros, con cumbia norteña incluida, sobre la cajuela de un carro parqueado en La Lagunilla, justo detrás de Tepito. Dónde hay que ir a comprar las tejanas en Ciudad de México.

En el bolsillo derecho de la camisa llevaba una tarjeta de un güey que convidó en el Tenampa a no se cuantos mezcales y Don Julios y que le dijo –al enterarse que la próxima parada del güero era Monterrey- que en cuanto pisara Nuevo León le diera un fonazo de volada, para celebrar en el P´ilos y hablar de negocios.

Negocios de música y chambas e inversiones varias en España, había dicho el bato.

Vengo ocupando un carnal como usted compa, aventado, algo desconfiado y que conozca en Norte de España, jajajajaja rio.

 

Pos ni modo. Acabó esa semana de infarto en Mazatlán asoleándose con su chata de Tabasco, dejó lo de Culiacán para más adelante, subió al avión a la hembrita: “Te caigo en tu tierra en un par de semanas para seguirle chula”. Y el con su Gabbanelli, agarró un camión que lo dejo en la Estación de Autobuses de Monterrey, desde dónde –a pata como siempre- se fue a su hotel favorito.

Esa noche al antro de turno, solito, en paz y en gracia de Dios.

“Y mañana llamo al güey, al regiomontano del Tenampa, a ver que onda”.

 

José Juan Aparicio.

20-Septiembre-2018.

 

Próximo capitulo: “LA PECERA DE TASQUEÑA”.