Gallegos en México

Gallegos en México

No digo yo, que sean todos, pero una parte importante de los emigrantes gallegos en México, se la gira de la forma que voy a contar.

Al irse a buscar la vida al extranjero pasa de todo, el que se queda en los años sesenta, con Joselito, la burra de Mijas, la muñeca legionaria y el puto toro con dos banderillas en la chepa. Esos no se han enterado todavía que lo de los toros, además de carca, no se lleva ni el mango de los paraguas. Pues si algunos no hicieron plata y ni vuelven, ya no tienen casa, o esta hecha mierda y se desconectaron con la familia, además esta el pudor de regresar igual que te fuiste, o sea, con lo puesto. Esos ni modo, vegetando en Mex a ritmo de pasodoble de Manolo Escobar.

Luego están los “Chingones de Avión”, que en muchos casos, vienen a ser los “Acojonados en Mex”. Esos chambearon en el jale que encontraron al llegar, se hicieron codos a fuerza y subieron. Orita tienen mueblerías, funerarias y hoteles, la mayoría de “Paso”, o sea por horas para coger. También tienen de los otros hoteles, algunos de los buenos.

Allí en las ciudades que viven se instalaron en “privadas”, se apuntaron a clubes sociales y vegetan en sus jaulas de oro, acojonados con la inseguridad, los secuestros y tal, amasando pesos, con sus hijos en colegios privados y presumiendo entre los paisanos.

Luego llegan a Avión a jugar la partida y a apantallar a todo lo que da con el mercedes y las hijas e hijos pijo-mex, o sea “fresitas” que se dice allí, wasapeando a todo lo que da y aburriéndose como ostras en la provincia de Orense, con el calorón que hace ahí en verano.

“Claro Maruxa es que Leiros esta forrado, gana una feria en América, trabajando como loco”.

Una pequeñita puntualización, queridos paisanos, que no “pelais” ya a ningún gallego que se os presente tieso por allí. Aquello de: “Vengo de parte de tu prima Fina la de Bande”, ya no funciona. No vaya a ser que le tengáis que decir que allí ya no hay trabajo.

Y chamba en Mex, es lo que sobra, claro con las recamareras y los meseros de vuestro hotel cobrando 1000 pesos mexicanos a la semana, lo cual es una puta estafa, pero allí los sueldos son así.

No va a ser al final, Pepiño, que tú como ganas la plata, mejor dicho, como la ganan otros para ti, es de negrero. Si, como cuando lo De Colón.

Sólo que esta vez los esclavos, son de allí. También tostaditos, la raza.

“Yo cobro en mi hotel a precio internacional, en dólares o euros y pago a mis trabajadores en sueldo de miseria mejicano, en pesos”.

Claro eso queda peor, dicho jugando al dominó en Ourense.

Tons digamos:”La crisis en México esta a todo dar, menos mal que la raza allí es bien chambeadora, aquello ya no es lo que era, me voy a devolver para Galicia, que allí los salarios están subiendo mucho”.

Mejor fletate una patera, con destino a Veracruz, con mojados africanos y te los pones a jalar en tu hotelito, por la comida. Esos te salen más baratos, pero no hablan spanglis.

Y es que el oficio de negrero últimamente está campeón, apenas si da para andar siempre con “Carro del año”.

José Juan Aparicio.

10-Julio-2017.