La
vanidad del más chingón.
A veces para ser el más chingón –en público, saberlo tu sólo
no tiene gracia- ni siquiera hace falta follar.
Mi laaaaaarga sequía económica me traía a mal traer y ni
siquiera me pasaba por la bailada, si no se puede no se puede. El otro día me
cayó el veinte en forma de 50€, le eche ganas y me largue, que pase lo que
pase, Dios proveera.
Y no hay nada mejor que olvidarse del mañana, del ayer y
largarse de parranda a quitarse lo dolido.
Con ojitos lindos que es el mejor método.
Las pendejas envidiosas españolas no las pueden ver y claro
las ponen de putas p´arriba, pero es na más pura envidia.
Nada menos que –coincidencia- tres brasileñas, en dos
tandas, una suelta y dos amigas.
Requetebuenas, para no variar: “Pues no se que les ves”. “No
nada son de los más normalito” pienso pues ni me molesto en contestar.
El Bolero petado hasta la bandera, la “Estrella de Galicia”
helada, el corazón fresco y la loción de afeitado casera –con la crisis me la
preparé yo- pero haciendo milagros.
“Pues no vienen a lo que vosotras pensaís pedorras, la
primera es dentista tiene clínica en Sao Paulo y se levanta una lana”. Las
otras dos viven aquí al lado una con peluquería propia y la otra separada de un
rico. Os enteráis ricas, que culpa tiene uno de que la competencia os sea dura.
Y claro a la bola de parroquianos del antro, los de a pie de
obra, los contratistas palurdos con plata, los cirujanos pijos y casados y los
profesionistas los traían acojonados.
Como que les metían miedo, muy guays ellos y elegantes pero
temblando.
Así que se va el güerito directo a la primera, la dentista
que estaba solita y bla bla, acababa de llegar ese mismo día de Brasil, por
primera vez a España acompañando a sus dos tíos, un matrimonio de jubilados,
metidos en los ochenta que no andan ya pa mucha samba.
Le gusta U2 y no baila muy bien, pero nos echamos unas
piezas y el personal pasmao. “Bueno chula pues bienvenida a esta tierra de
pelotudos, hasta la próxima”.
Lo de las otras dos de la barra fue mucho mejor, los babosos
no se atrevía a cruzar la frontera del encanto de aquel par de belezas, una muy
tostadita, marroncito y la alta blanquita y presiosa.
“Será que hoy es el día de las chicas de brasil”, presumo de
mi excelente portugués producto de varias novias portuguesas y –como no- una
brasileña, aparte de haber nacido rayano.
“Mais voçe como supo”???
“La beleza menina, tem que ser”
Y bla,bla,bla
Hasta que la banda toca una bachata de las chingonas y la
tostadita me presume: “Voce sabe”????
Allí al lado de la barra nos marcamos el melhor baile que se
ha visto en la historia de esa sala, apretaditos, metiendo pierna, disociando y
apretando por arriba y por abajo, con las acrobacias justas.
Los güeyes pasmados, baboseando y hasta animando, las chicas
“da terra” flipando en colores y las camareras, unos encantos en ese sitio,
guiñándonos el ojo.
El Güerito ha vuelto, con ganas y sin novia.
“Ya destroce corazones
Tome tequila a
montones
Y esto, no mas
Ha empezado”.
Me regreso al principio, copiar y pegar.
“A veces para ser el más chingón, ni siquiera hace
falta follar”.
PD: Gracias a Jacki por las fotos de su pelu.
José Juan Aparicio.
17-Noviembre-2016.
No hay comentarios:
Publicar un comentario