LA COCKTELERA. Porras XL.

 

LA COCKTELERA. Porras XL.      

 

La churrería más famosa de Madrid probablemente es la de San Ginés, al lado de la Plaza Mayor en el Pasadizo de San Ginés. Dónde muchos de los “bolas” del foro rematan sus trasnochadas.

Hay varias chocolaterías muy populares sembradas por la capital, pero la que hace las mejores y más grandes porras de Madrid es La Coktelera, Alcalá 420, Ciudad Lineal.

Me aficione a ese bar porque me pillaba de camino de vuelta y de amanecida a casa cuando vivía en Canillejas, al final de la laaaaarguisiiiiiiisiiiiiiima calle Alcalá, justo dónde pega con la pista de Barajas y muy cerquita del Torrezno, otro bar clásico de currantes.

 

Lo de grandes es cuestión de cortarlas así claro, pero es que te las ponen en un plato de los de comer y se salen tres dedos por cada lado. Y lo de buenas, será el aceite de oliva con la grasa y el frito justo.

 Allí varias veces, teniendo aparcados mis dos perros en el árbol de la puerta les partía una porra –media para cada uno- de las tres que ponen con el chocolate y nos hartábamos canidos y homínido. En el transcurso del paseíllo porra en mano hasta fuera me miraba el personal –tanto bolingas como señoras madrugadoras- con intriga hasta que comprobaban con risa, asintiendo a mi vuelta a mi sitio y satisfecha su curiosidad, sobre el destino de mi recorrido: “Es que con este tamaño las porras dan pa tos” alegaba yo en plan chulapo y entonces el “camata” un típico madrileño de pro, de toda la vida y natural de Burgos voceaba al estilo “gato”:

“Las mejores porras de todos los madriles, pal niño, pa las nenas y pa los peeeeerrrros oiga”.

Y sí que lo oían, hasta en Las Ventas, dos kilómetros y medio más abajo.

 

José Juan Aparizio.     

17-Noviembre-2020.

                

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

HORÓSCOPO.

 

HORÓSCOPo.

Cuando trabajé en la radio, en los informativos y en los magazines, solíamos incluir el horóscopo. Igual que el parte meteorológico. Tradiciones periodísticas no más.

Yo presentaba con una compañera y entonces íbamos alternando, tán-tán. Tu Piscis yo Leo etc.

El cuento es que todos los presentadores, llegado ese momento, agarraban cualquier diario de los que había ciscados encima de la mesa y al tún tún, eso sí con la delicadeza de cambiarlos, pregonaban –mencionar aquí que hablo siempre de programas en directo- las prescripciones oportunas –para el día- de los diferentes signos. Donde ponía capricornio, leían lo de Tauro: “Buenas señales en tu karma, dulce sueño primaveral, juega al 8”.

Yo no cogía ningún diario, lo que sorprendía a los no acostumbrados, me divertía inventándome los consejos por mi cuenta y sobre la marcha: “Cuidado Aries, tu genio te traiciona, vete al cine, bebe con moderación” y mis envidiosos y tarugos compas se morían de risa.

Esta costumbre luego la convertí en broma.

Que use –a menudo- sobre todo con el género femenino.

Más o menos de la siguiente forma.

Antiayer –época Coronavirus- compartía mesa con una señora, terraza, distancia social, mascarilla, na de besitos pa saludar y demás protocolos de la OMS.

Yo leía el diario del bar (no sé si fuera de norma) y –mi broma funciona así- al llegar al horóscopo, miro a mi acompañanta y leo en alto: “Capricornio (el mío improvisado). Buena suerte en el amor, riñón infectado, sal a la naturaleza”.

La doña que no conoce mi maña se ríe y ahí, yo le digo: “¿Te leo el tuyo?”.

Claro contesta.

“Sagitario: Se avecina apocalipsis. CV 19. Cásate con un depredador. Llueve en tu alma”.

Me mira algo feo, se medio mosquea: “¿Dice eso?”, pregunta.

Le paso el diario, lee, ve que me lo he inventado, se carcajea, disfruta la broma y pregunta: “¿El depredador eres tú?”.

“No, ni tampoco la presa, yo sólo soy un superviviente, de los pobres –me gusta ir de pobre- dicen”. “Además orita no se puede comer de na, por los contagios”.

Al rato pagamos, mejor dicho paga ella, chocamos codos y cada quién pa su casa.

Ella se va pensando: “Se me escapó vivo este cabrón -con el hambre que hay en el confinamiento- aséptico y exquisito”.

Y yo divago: ”Los tigres -mejor las tigresas- sólo aciertan uno de cada diez de sus ataques en busca de presa”. Y, por otra parte, cuando hay miedo de que te coman, por muy pequeñitos que sean los bichitos- nadie piensa en coger.

“¿Será la próxima chiquitita?”.

 

José Juan Aparizio.

16-Noviembre-2020. (El año cabrón).

 

 

 

 

 

 

VINS MOTO: LA ÚLTIMA  2T.

Las motos italianas no fueron nunca Santo de mi devoción, a pesar de mi Guzzi 250 2T, que reconozco no estaba mal. Es además una buena máquina clásica, bien entendida (pasando la instalación eléctrica a 12voltios y eliminando la batería).

En general siempre serán mejores y darán menos problemas las japonesas.

Pero hay que reconocer el mérito de estos italianos. En una época de restricciones Euro 5 y demás pendejadas han tenido los huevos de sacarse de la manga un 2T, 250cc, 105 kgs y 75cv. No sé cómo pasaran las itvs, los humos y lo demás, pero si consiguen matricular esa joya, que tendrá un precio parecido al de un black hawk (helicóptero de combate usa), va a hacer historia.

Habrá cola –seguro- para tenerla y en rutas reviradas o circuitos como Jarama y Calafat, me parece que las “erres” de 1000 cc de calle de 200cv de Honda, Yamaha, Suzuki, Kawasaki, BMW, Ducati etc van a sudar para coger el rebufo de una bomba con esta proporción kilo-caballo.

Ha llegado la TZ del s. XXI.

Dejo enlace: vinsmotors.com y evito más charla.

Simplemente ver la foto de arriba.

José Juan Aparizio.

6-Noviembre-2020.

 

CUIDADO CON LOS CHINOS. La amenaza Chong.

 

C UIDADO CON LOS CHINOS: La amenaza Chong.

Parece que los chinos tienen controlado el Covid con un dominio total sobre todo su territorio, población y visitantes.

Aislamientos, seguimientos, pruebas, información, cuarentenas efectivas y resumiendo: “Saben dónde, cuándo, porque, quien, como y para que mea cada individuo en su país, cuantas gotas echa al sacudírsela y por supuesto de que tamaño tiene la verga”.

Gracias a la tecnología punta, la geo localización, el pago de todo desde el móvil y como refuerzo el antiguo método comunista del “vecino-chismoso-espia” de los servicios de información gubernamentales de China, calcado y replicado igual que sus “copias mierda” del AK 47, de sus vecinos ideológicos. Los rusos.

El “Gran Hermano Asiático”: Respire poco, con permiso y produzca mucho.

Curiosamente esos ejemplares que predican el pago virtual, el control total, son los que dentro y fuera de su país encadenan a sus súbditos a las máquinas de coser con la tacita de arroz diaria como sustento.

Los que sirven sus muertos disueltos en el Wun Tun de los restaurantes chinos. Los que usan la documentación de esos difuntos hasta nueve generaciones después, aprovechando la vulnerabilidad de las burocracias occidentales: “Todos los chinos son iguales”.

Y como no, los que envían sus ganancias   del extranjero en “negro” –sin control, ni gps- de vuelta a china en “cash” puro y duro (euro y dólar).

La teoría de que soltaron ellos el bichito, de que ellos distribuirán la vacuna, empezando por si mismos claro, cobra mucha fuerza.

El dominio comercial del mundo mediante su industrialización esclavista ya lo tienen.

Orita quieren el poder mundial, universal y galáctico total tanto el ideológico como el geostatico:

“Muévase un paso a la derecha güey, cambia a Fa compa, no hoy no le toca coger, sólo mañana y la enchilada pal jueves que es cuando se come pa no engordar”.

“Ah y de vacaciones 10 días al año, en manada y sin descarriarse, como chinito quelel”.

El “Yellow Power” llego para quedarse.

Si no los mandamos a chingar su madre ayer.

Por otra parte las teorías conspiracionistas acerca de la pandemia, un nuevo orden mundial, el dominio del capital y el sometimiento de las masas a dictados tecnológico-capitalistas tampoco son ninguna broma.

Los viejos ejes oriente occidente, comunismo capitalismo todo revuelto y compinchado para reventarnos ya la  cada vez más puta vida.

 

José Juan Aparizio.

3-Noviembre-2020. (Del año chino).