Volver,
volver a los bailes roñosos,
Aunque sigo siendo un fan de la Discoteca La Luna
(Pontevedra), me choca devolverme a España y meterme en unos bailes dónde la
música es refea, las mujeres –dejémoslo- en “guapiñas” na más y los vatos
(tios) una bola de capullos.
A ver, el imbécil del profe de acordeón, de no se que
conservatorio, creo que es el de mi pueblo, con su trío de limosneros,
simplemente da asco con su música de la época de mi tatarabuela. En mi Norte ya
los habría plomeado.
Para no extenderme sobre las morras de por aquí sólo comento
que se visten como mochas (mojigatas), aquí serían “mouchas” y que bailan como
el culo, aunque se creen todas las “Reinas de la Bachata ”. Algo habría que
explicarles sobre el “Animal Print” de leopardo, jaguar o cebra en versión mono
integral, pero para que.
Y los babosos de los fulanos se sacan un 0 en conducta. Si
en otro sitio le entraran a una chica que habla con un gúey, les parten la
madre y punto. Pero esos atletas del Gym, no pisan dónde si te pasas te hacen
pupita y además para enterarse de dónde es eso tendrían que aprender a leer,
una tarea harto trabajosa para esos putos.
Los D´J o sea disc-jockeys deberían dejar de poner “Carmiña
como se menea” un gran hit de un tarugo local y darse una vuelta por youtube, ya
que están tan conectados todo el rato duro y dale con el cel. Sí, el corte de
pelo a lo tejón les vale, muy actual, pero lo pendejo no se les quita fácil.
Dos pistas de gratis: “Me sacaron del Tenampa” con Cornelio Reyna y “Nada
contigo” de los Huracanes del Norte.
En resumen que lo de volver, volver a tus bailes otra vez ta
campeón, mejor regresarse de volada dónde entiende de música y de baile.
Una feliz coincidencia, con el otro lado del charco, los dueños
de los antros son los que mejor quedan en esta mochadita que le estoy dando al
sector. Esos sí. Los que no se quedaron en el Pleistoceno están en la onda del
lavado de feria con origen blanco.
Viven en la redundancia blanqueando lo de la blanca.
Pura chamba de detergente.
José Juan Aparicio.
17-Junio-2017.
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