Bebo en compañía.

Es lo que dice mucha gente en webs, páginas de contactos, perfiles online y en la vida en línea en general.

Por supuesto es mejor beber en compañía, pero creo que sólo a veces, pues igualito que en la vida misma a menudo la compañía sólo chinga y entonces pues “pa que?”.

Beber mejor sólo que mal acompañado, la soledad del bebedor de fondo y todas esas memeces del cine y la literatura profunda pos “pa que?”.

Cuando la compañía es agradable, femenina y chingona ok, pero pa beber con una bola de borregos viendo el Real Madrid, o en un puti club baboseando en manada “pa que?”.

Agarra, a poder ser tu solito, en tu carro chueco de uso, la carretera de Oaxaca a Tehuantepec,  luego a Mitla. (Ruinas Mayas, piedrecita antigua, sepulturas, arquelogía y demás, quedarás muy Indiana Jones).

Pero lo bueno está en el medio del camino que esta sembrado de jacalitos y fabricas artesanales de mezcal. Te paras te avientas tus traguitos, en muchas también hay tacos, te compras una botella pa ti pal carro y otra por si va a haber mordida y bebes sólo o en compañía del mezcalero.

Luego en Mitla ya en la cantina le pides al del “Fara-Fara” (Grupo Norteño) que se aviente la de “Dos botellas de mezcal” y cuando tu mismo ya las lleves entre pecho y espalda, si eres de los lanzas y chingones -ayudado por los tacos no te pasará nada- le encontrarás el punto a lo de beber sólo.

En esos momentos, la suerte también influye, es cuando sentirás la necesidad de beber en compañía y por esas tierras puede que la encuentres, de la agradable, de la cara, o de las dos juntas.

Que a esas alturas del partido te va a valer madre cual de las dos sea, con tal que tenga un par de “Esos ojitos lindos que quitan lo dolido”. 

Que dice un corrido.

Entre eso y la bebida más espiritual y espirituosa del mundo, tocarás el cielo. Algo muy fácil cerca de Monte Albán.

José Juan Aparicio.

13-Octubre-2016.