A
POR UVAS
“Te dije que no plantaras
Las uvas en el camino
Porque la gente que pasa
Corta del mejor racimo”.
Chalino Sanchez, Corrido “Las Uvas”.
Lo llevo diciendo hace siglos: “El campo tiene ojos”.
Si te tienes que esconder hazlo dónde haya mucho personal,
millones mejor, en una pradera desierta se te ve a la legua y entre los ociosos
pastores etíopes o peruanos, aburridos de tirarse cabras o llamas sobran los
metiches.
Ayer leyendo “Chiapas México Desconocido” de Raul Perez
Lopez-Portillo (recomiendo este libro), fíjense como les gusta a los “fresitas”
mex igual que a los pijos de aquí los apellidos compuestos con guión por medio,
sobre todo cuando el primer apellido es vulgar. Así se dan pisto los pendejos
esos de frenillo en la lengua.
El caso es que en la pag 147 dice textualmente: “Las
montañas y las selvas tienen más ojos que las ciudades”.
Y horita voy a lo de las uvas. Vivo en el campo, en una zona
vinícola de montes y viñedos, de buen alvariño.
Paseo mis perros por la tarde-noche en verano y en esta
época próxima a la vendimia meriendo uvas tintas, sin abusar, sólo un racimo.
Pero como el campo tiene ojos el otro día yendo a por uvas,
me encontré al paisano con to y tractor. Me hice pendejo para que no se notará
la maniobra de desviarme, “buenas tardes”, pongo campo por medio y al rato le
comento a Rubio mi perro, en plan zorra: “Bahhhhh, todavía estaban verdes”.
El gallego y yo lo soy es por naturaleza envidioso –como los
españoles- mezquino y rata, hasta montar bronca por un racimito.
Al día siguiente, con menos ojos en el campo –nunca se sabe-
pillo un racimo, lo envuelvo en el pañuelo y tiro pa casa.
Respecto a las preguntas claves del buen periodista que me
enseñaron en La Facultad
de Ciencias de la
Información de Madrid, dónde me lisensie que dicen en mex,
diré lo siguiente. Estas preguntitas de marras coinciden muchas veces con las
mismas preguntas claves de las pesquisas policiales.
QUE: Uvas.
QUIEN: Yo.
CUANDO: Hoy, ayer, mañana…
PORQUE: hambre.
DONDE: esta es la cuarta pero yo la pongo al final para
explicar. Esta es en mi caso la pregunta del millón. Del que me ve con el
pañuelito, que sabe, aún sin ver que son uvas.
¿Dónde? Pues busque usted por las 400.000 parras que hay por
aquí a ver si le haya y para ese entonces seguimos con la investigación y el
posterior alegato que diríamos en términos judicial-policiales.
José Juan Aparizio.
9-Septiembre-2019.
No hay comentarios:
Publicar un comentario