Reescríbelo.

Reescríbelo.

“Está bien, bueno aquí utilizamos más el punto y seguido. Centra la atención en el tema. Reescríbelo”.

Vale Irene.

Ok Manolo.

De acuerdo Tomás. (To con punto y seguido).

Da igual el nombre del cabrón de redactor Jefe que tengas. Su palabra favorita será esa: REESCRíBELO.

Pero tranqui socio con la palabrita lo que quieren decir es: “Hazlo como lo haría yo, que no tengo ni puta idea de cómo se hace nada, excepto chupar pollas”. Por eso soy redactor jefe.

Aviso a los becarios o plumillas novatos y acojonados. Relax, Está todo ok, controlado.

Esos tipos no han leído tu articulo, no saben leer, además lo último que tienes que hacer es reescribir nada.

Le cambias la primera palabra por la segunda, le cuentas cualquier pendejada:”Jefe orita ya sale, calentito, me trae usted en chinga con tanta chamba”, en tono adulador –eso sí- sobre todo relax, mucho relax.

Lueguito lo imprimes y se lo plantas en la cara, con mucha urgencia y harta pleitesía.

“Ves como ahora tiene otro cuerpo la noticia, tu hazme caso chavito, llegarás lejos”.

“Pues vale, pues m´alegro, gracias por adoctrinarme campeón”, piensas para y dentro de lo más hondo de tu alma.

En el mundo del periodismo te vetaran elementos con cara de “Candado” – pregúntenle al maestro P-Reverte - pues te jodes y te aguantas. O te arrimas como hacen muchos, respiras y vas comiendo caliente. Con el candado en la boca y en los huevos. Por respeto al macho alfa, oiga.

También te pisaran tus “scoops” (exclusivas), si te dejas y enseñas, antes de tiempo lo que no tienes que enseñar. Puedes pasar, matarlos o reclamar al maestro armero.

En el periodismo te ofrecerán una mierda por un super-reportaje, para promocionarte y abrirte camino, dice el reportero de guerra estrella de la casa, sin despeinarse y con su voz de pito.

Lo más fácil, de todas formas es que te toque irte pronto a la calle: “Que es un psiquiátrico muy grande”, dicen también.

Ya sabes, lo de: “Si algo puede salir mal……….

De todas formas, lo mejor es la tranquilidad y el relax, siempre.

Ah y que lo reescriba su chingada madre.

José Juan Aparicio.

12-Mayo-2015.