Una cosa es pedirle al santo y otra esperar el milagrito.
Los, las hay muy pedichones, méndigas o
limosneros. Aquello del que no llora no mama y todo lo demás. La verdad es que
es jodido pedir. “Dame argo pa mis niños”. Aunque me he pasado media vida pasando
“el parche”, la pandereta: “Aquí la señora, la que lleva la economía familiar
(saltando) si, si, ahí porfa, ese, ese, el de cinco mil”.
Lo de pedir nunca me dió vergüenza: “Por favor
todos contra la pared, esto es un atraco, tu quítate el bra y enséñame las
tetas werita”, como decían en Perdita Durango.
Pedirle a los Santos, a los dioses, o a los
mismísimos brujos ya es otro cantar.
Hay que tener mucho tacto, mucha fe y
muchísima paciencia, por lo de la espera.
El tacto es fundamental: “Mira San Patrás (Patrón
de los desheredados) porfa, hazme el milagrito de lo de la RISGA (Renta de inserción
gallega), lo de la inserción está muy claro. Para insertarte la miseria por
detrás. Pos eso patroncito, que es pa ir comiendo, en días alternos de momento.
Que no te pido mucho. No más pa que no me lleve la chingada. El primer mes te
doy tus cinco euritos ¿Si?
O: “Querida Tía Lola: que poca mano ties ahí
arriba pa lo de las quinielas carajo. Ni la de doce. Mejor va a ser lo de la ONCE , bueno ta bueno, como tu
digas Loliña”.
La fe imprescindible:
“Si, primero me compro una buena troca, lo de
los guaruras, el oro y las armas después, si con alberca el ranchito, si amor”.
“Y te llevo a bailar a Chalma, no te preocupes, pa seguirle con los
milagros”.
Pero lo más importante, lo de la paciencia, sin
perderla nunca:
“Le limpio el parabrisas patrón”.
Límpiaselo a la ching………………..
“Perdón, si campeón límpiame el carro enterito
y con mucha fe, que te va a pagar la limpieza y los clínex San Judas Tadeo, el
abogado de los imposibles”.
Una tarde de estas.
José Juan Aparicio 19-4-2013.
No hay comentarios:
Publicar un comentario