Gracias por
invitarme a cenar
Hoy,
veintitantos de abril, primavera ya, fue un día completito.
Para
un marginal en espera de rescate.
En
la mañana me llega el cartero con un aviso de un bufete de cobro de morosos.
Porque
mi banco -que bien suena- les encarga cobrarme.
Me retrase 15 días, en pagarles el seguro de
mi carro, lo pagaron ellos sin consultar y me recargaron 20 €. En Noviembre,
que como no los tenia, en abril son doscientos y pico.
Nada
grave, eché el papelito a la basura sin pestañear.
Después
me llama un elemento de Guadalajara para comprarme una antigüedad de la huerta
de mi madre. Unas aspas de un molino protegido por patrimonio y todo lo demás.
Como cuando tengo gusa patrimonio me vale gorro, le digo que ok, pero que mande
primero la lana, que si no se va a afeitar con la depiladora de su suegra.
Estoy
esperando los sesenta euritos como agua de mayo.
Al
mediodía voy a recoger mi despensa (ayuda alimentaria para el sustento de
necesitados) al ayuntamiento.
Si,
el mismo que paga esta wifi municipal del PP.
“Muchas
gracias señoritas, que tengan buen día” y firmo como un indigente mas la recepción de la ayuda.
Perdonen
que les ABURRA CON MIS HISTORIAS DE POBRE, PERO MÁS ABURRIDO SERÍA EL CATÁLOGO
DE COMPRAS DE MARILÚ EN LA MILLA DE
ORO, O EL NUMERO DE CILINDROS DEL SPIDER DEL LOU GRAHAM EN UNA NOVELA-ANUNCIO
AMERICANA.
En
la tarde voy a arreglar lo de las aspas con un pariente colaborador que me echa
una mano, cuando le digo lo de los veinte euros porfa, que te los devuelvo
cuando cobre, responde que: “Nanai”.
Ya avanzada la tarde relax, paseo a mis dos canes y
un bolas de la aldea me invita a vino en su bodega.
Y ahora viene lo guay.
Me preparo la cena yo solito, sin velas, ni amor ni
na.
No se porque los renglones ahorita van de dos en dos,
perdón.
Judías verdes, tortilla francesa y alubias pintas,
con pan del día, agua del pozo y duraznos. Todo muy rico.
Agradezco pues al ayuntamiento, la wifi, la cena y
todo lo demás.
“Mamá vente pa España, que aquí a los pobres les dan
marisco” Oí decir el otro día, refiriéndose a una despensa de caritas con to y
calamares.
Y si, somos unos pobres privilegiados, por ejemplo el
menda, no paga el alquiler desde Julio pasado, pasó un invierno perro, pero
respira todavía. No vota a nadie y le dan de comer, tiene wifi pa marear a las
chatis y lo más sangrón de todo.
Piensa seguir sin votar a nadie en toda la vida.
Bueno, perdón, votaría con una sola condición, bueno
con dos:
“Que la despensa la entreguen chicas con acento
mexicano y que el alcalde, que ya fue de tres o cuatro partidos diferentes, se
presente a presidente del gobierno”.
En ese caso si le votaría, siempre me ha gustado la
variedad y sobre todo el pluralismo.
José Juan Aparicio 22-Abril-2013.