¿PORQUE NUNCA TUVE TELEVISIÓN?
Por supuesto en mi casa familiar si hubo televisión, primero
en blanco y negro, luego en color.
Cuando me fui a Madrid, con 18 años, deje de tener tele.
Y por inercia, porque en esos tiempos no paraba en casa, por
dejadez, por pobreza a veces, por opulencia menos – gastaba en otras cosas-
seguí sin televisión hasta hoy.
Menos un breve periodo de 4 años, cuando estuve casado, ahí
si hubo tv.
Ahora en el encierro del “estado de alarma” mucha gente me
pregunta que hago sin tele, ya me ofrecieron varias, prestadas o dadas, pero ni
antena, ni instalación hay por aquí. Parece un suicidio pasar el aislamiento
sin ella.
Para la radio perdí el hábito y aquí no hay emisoras de
tex-mex o norteño.
La verdad cuando me comentan lo de la tele casi ni contesto.
Seguro que me vendría bien, pienso como tantas veces.
Cuando pase esto, si yo llego a verlo, no nos engañemos
llevo números como todo el mundo en esta lotería mortal, seguro que tendré
intención de ahorrar para una tv.
Como también tengo intención de salirme de la ruina, de
evitar morirme de hambre, de tener moto y de beber mucho mezcal y chelas en sitios que sé y con música que me gusta.
La tele será lo de menos en esta partida, lo que más importa
de momento es ganar la mano.
Porque los que pierdan este juego la próxima timba la van a
jugar con quién todos sabemos.
José Juan Aparizio.
2-Abril-2020.
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